El 4 de julio, Día de la Independencia de los Estados Unidos, es uno de los días festivos más importantes de los Estados Unidos. Y la Gran Manzana es sin duda uno de los lugares ideales para pasar este día y disfrutar plenamente del patriotismo nacional estadounidense.
El origen de la fiesta
El 4 de julio de 1776, trece colonias británicas del nuevo continente (Pennsylvania, Massachusetts, Virginia, Maryland, Georgia, Nueva Jersey, Carolina del Norte, Carolina del Sur, Connecticut, New Hampshire, Rhode Island, Delaware y Nueva York) firmaron la Declaración de la Independencia en Filadelfia.
Con este acto, los trece estados se declararon independientes de la madre patria Inglaterra, que siempre les había negado la posibilidad de estar representados en el gobierno británico, a pesar de estar obligados a pagar impuestos.
Qué hacer el 4 de julio en Nueva York: de día
En un día que será celebrado por toda la población, la ciudad ofrece muchas oportunidades para disfrutar de esta fiesta al máximo. Estas son algunas de ellas:
- Pasar el día en los parques de la ciudad, con áreas acondicionadas para barbacoas que permiten relajarse en compañía de familiares y amigos. Si tienen la oportunidad y el deseo de pasar este día con un american style perfecto, les recomiendo el menú tradicional para la ocasión: aros de cebolla, alitas de pollo fritas, cupcakes (decorados con los colores de la bandera estadounidense) y, finalmente, el plato principal, las Spare Ribs, o costillas de cerdo cocinadas en la barbacoa y sazonadas con salsas de varios sabores.
- Ir a la mundialmente famosa playa de Coney Island. Aquí, entre una zambullida en el océano y una caminata por el paseo marítimo, podrán disfrutar de las presentaciones de varios artistas callejeros y música en vivo.
Una parada obligatoria para los amantes de los hot dogs es el famoso Nathan's Famous, que como todos los años organiza el Hot Dog Contest: un emocionante desafío entre los comedores más voraces de perros calientes.
- Visitar los principales atractivos de la ciudad. De hecho, la Estatua de la Libertad, el Empire State Building, el Top of the Rock, el Museo de Historia Natural, el Museo Metropolitano, el Museo Guggenheim y el One World Trade Center estarán abiertos en este día. Además, dada la coincidencia, sugiero una visita a los lugares simbólicos de la historia del Día de la Independencia: el Bowling Green Park, que acogió las primeras reuniones de los independentistas estadounidenses, la Saint Paul Chapel, donde se encuentran los restos del General Richard Montgomery y la Fraunces Tavern, donde se guardan reliquias y pinturas de la época.
- Dedicarse a las compras. Para aquellos que gustan de las compras, no hay problema, pueden ir a las tiendas, ya que permanecerán abiertas durante todo el día.
Qué hacer el 4 de julio en Nueva York: por la noche
- Asistir al espectáculo de los fuegos artificiales organizado por las tiendas Macy's. Este año 2019, los fuegos serán lanzados desde cuatro barcazas que se alinearán cerca del Muelle 17, cerca del Puente de Brooklyn.
El espectáculo de fuegos artificiales comenzará a las 9:20 pm y durará aproximadamente 25 minutos. Se esperan unas 75,000 explosiones (con la inclusión de nuevos efectos como por ejemplo Hidden Happy Faces, Revolving Dragons, Wolf Whistle, Multicolor Meteor Mines y Little Snakes). El resultado será un evento maravilloso que iluminará todo el horizonte de la Gran Manzana.
Macy's ha compilado una lista de lugares recomendados desde donde se puede disfrutar el evento (recomiendo ir a estos lugares con tiempo, ya que generalmente comienzan a llenarse en las primeras horas de la tarde). Los encuentran a continuación.
Entradas al FDR Drive:
- Broad Street y Water Street (es el punto de entrada más al sur para disfrutar de todo el espectáculo);
- Pearl Street y Dover Street (representa una ubicación privilegiada muy cerca del Puente de Brooklyn);
- Robert F. Wagner Sr. Place y St. James Place (una ubicación que les permitirá tener una vista de primera fila de esta fantástica exhibición de los fuegos artificiales);
- Pearl Street y St. James Place (representa un punto de vista fantástico pero muy concurrido);
- Montgomery Street y Cherry Street (una esquina del Lower East Side desde donde se puede ver el Puente de Brooklyn y las barcazas más al sur);
Entradas desde el Lower Promenade:
- Pike Slip y Cherry Street (ubicación a pocos pasos del Puente de Manhattan);
- Market Street y Cherry Street (hay acceso para personas con movilidad reducida en las instalaciones del Murray Bergtraum).
- Participar en un crucero nocturno. Esta es una opción perfecta para aquellos que buscan una alternativa más cómoda para disfrutar del espectáculo, evitando el calor y las multitudes.
- Degustar una bebida en un bar con terraza panorámica y disfrutar del espectáculo. ¡Como siempre, la vista de la ciudad los dejará sin aliento!